Torta de queso y frutillas

Ingredientes:

Bizcochos dulces molidos

Azucar

Manteca

Queso crema

Crema doble

Limon

Esencia de vainilla

Yemas

Maicena

Claras

Frutillas

Mermelada de frutillas

Procedimiento:

Coloque sobre la mesa una taza y media de bizcochos secos dulces molidos, 3 cucharadas de azúcar y 70 gramos de manteca derretida. Frote todo entre las palmas de las manos hasta lograr una mezcla que tenga apariencia de "arena gruesa".

Enmanteque un molde desarmable de 22 centímetros, vuelque el granulado y presione con una cuchara para adherirlo a la manteca y forrarlo en un espesor parejo.

Ponga el molde en horno mínimo durante 10 minutos. Retire y reserve.

Mezcle en un bol un pote grande de queso crema (400 gramos) con tres cuartos de taza de azúcar, 200 gramos de crema doble, la ralladura y jugo de un limón grande, una cucharadita de esencia de vainilla, 4 yemas, 50 gramos de manteca derretida y una cucharada de maicena (algo panzona...).

Únale suavemente 4 claras batidas a nieve. Vierta en el molde forrado con bizcochos. Cocine en horno moderado (tirando a suave) hasta que el relleno esté firme.

Retire y deje reposar 10 minutos. Afloje el aro lateral del molde, pero todavía no lo retire. Hágalo recién después que la torta esté bien fría. Pásela a una fuente.

Unte la superficie de la torta con una capa fina de chantillí y cúbrala totalmente con frutillas enteras, dispuestas en círculos concéntricos como si estuvieran "codo con codo".

Disuelva sobre el fuego 3 cucharadas de mermelada de frutillas con 3 cucharadas de agua y 2 de azúcar. Cuando se forme un almíbar espesito retire y tamice. A esto se le llama mermelada reducida.

Pinte con la mermelada reducida las frutillas (de esta manera quedarán bien brillantes y tentadoras) y estacione la torta en la heladera hasta el momento de llevar a la mesa. Un manjar.